miércoles, 10 de junio de 2020

EL ENCIERRO POR EL COVID-19


Quizá no todos estén de acuerdo conmigo, pero cuando comenzó esto el lunes 23 de marzo, quizá para otros ya el viernes 20 de marzo (2020) pensamos que sería como en 2009 cuando  " la gripe porcina", de hecho cuando mi esposo me comentaba las noticias que leía sobre cómo iban las cosas en China, Italia y España, me preguntaba sobre lo que pensaba, y le respondía, - de hecho ya se tardaron deberían de mandarnos ya a descansar como en el 2009. Lo decía así porque en esa ocasión fueron tan solo dos semanas (ahorita ya llevamos 12). Bromeaba con él diciéndole que estaría súper bien porque en mi trabajo los alumnos no me prestan lucha atención y para mí sería bastante relajante un break. 
Ahora que recuerdo mis palabras y mis bromitas, recuerdo la frase de "ten cuidado con lo que deseas y pides, a veces el universo está de buenas y te lo concede" y bueno no dejo de repetirme que era solo un comentario, un decir, creo que nadie nos imaginamos en el escenario en el que estamos. 

Es más muchos quizá pensaron que serían unos diitas y ya, porque eso de estar encerrado en familia no es el máximo deseo de muchos y más sino sabemos convivir, no es lo mismo vernos unas horitas y ya, a vernos y convivir todo el tiempo (a excepción de las horas de sueño) ha Sido realmente complicado para muchos.

Para mí en lo personal en el trabajo ha Sido encierro grado frustrante porque si en clases presenciales no me hacían caso los alumnos, no prestaban atención a las explicaciones, es más me atrevo a decir que ni clase podía dar por el desorden; ahora es frustrante porque a pesar de tener las herramientas, los materiales y la información, siguen muchos en la actitud de no querer trabajar, es más muchos lo consideran innecesario porque al final por la situación se les debes acreditar el año, muchos que quizá tengan otras actividades que consideren más provechosas a las que deban invertir le tiempo; y bueno aprendí a sobre llevar esta frustración al entender que solo, SOLO DEBO PREOCUPARME Y OCUPARME POR AQUELLO QUE ESTA EN MIS MANOS. Y al menos en este aspecto me ha funcionado. Hago lo mío y lo que me corresponde al máximo como debe ser.

En cuanto, a la convivencia familiar y el encierro lo más complicado ha sido el hecho de estar encerrados, porque pues uno se esperaba que fueran solo unos diitas, y volveríamos a nuestra rutina, y ahora debemos acoplarnos a esta nueva rutina que para muchos ha sido complicada, a mi mi me complica salir, me aterra, pero pues uno debe aprender a salir tomando sus precauciones, el gel, el cubrebocas o mascarilla, los guantes, y regresando a casa limpiar zapatos o de preferencia tener un cambio, cambio de ropa y lavarla; ¡Ah! Y lavar todo lo que se compró. Eso ha Sido muy muy estresante para muchos, la nueva rutina y forma de vida. 

La convivencia en familia puede ser estresante, pero también muy divertida si tenemos niños porque quieren jugar todo el tiempo, la casa no dura en orden porque sacan y sacan juguetes y juegos que implican que la casa esté revuelta; esto es estresante por las tareas y actividades que tienen de la escuela y acoplarse a los horarios ha Sido complicado porque ellos no quieren acoplarse, saben que están en casa y ésta es para descansar y jugar. Con los hijos mayores de secundaria o más puede ser sencillo pues ellos son más consciente (en caso de que lo sean) se arreglan sus horarios y actividades, pero no falta que se distraigan con el celular mirando videos, redes sociales y con los amigos.

En esto no puedo quejarme ha Sido relativamente fácil, pero ya tantos díitas ya comienza a ser estresante hasta para los niños saber que deben estar encerrados no es fácil. Extrañan sus actividades como las clases de danza, las salidas al cine, patinar y la bici por las tardes.

Yo extraño mis caminatas en la mañana en la pista de correr, el fresquito de la mañana después de dejar a mi hija en la escuela, el regreso y apurarme a la casa y la comida. Cuando tenía las clases bueno las caminatas en la tarde y patinar. Ahora ha Sido complicado crear una rutina y más aún porque no hay horarios fijos para las actividades laborales. Siento que todas nuestras actividades se han vuelto de tiempo completo.

Que decir de sueño, siempre estuve acostumbrada a dormir hasta tarde, pero aunado a ello el estrés, tuve que ponerme en regla y acostarme a las 11-12 evitar desvelarme, para muchos ha sido fácil seguir con sus rutinas, pero para muchos ha sido realmente complicado. 

Esperemos que pronto podamos acoplarnos a esta nueva forma de vivir y que podamos hacerlo lo mejor que se pueda.